28 de Junio 2003

MOTIVADO....

...por Abrazononon, va otra de viveza criolla.

"Aplaudimos felices a Fidel, atendemos con simpatias a Hugo Chávez, vamos a Brasilia llevando como regalo la camiseta de Racing (celeste y blanca... patrocinador ¡¡¡ Petrobras !!!).... y luego Lula parte a los USA y ¡¡¡ arregla con Bush... !!!!. ¿No somos realmente muy vivos ????

Lula: "Sorprenderemos al mundo con la relación con EE.UU."

Lo afirmó luego de reunirse con Bush y aseguró que Brasil puede ser "un gran socio" de Washington. La cumbre, cargada de elogios mutuos, marcó un fuerte acercamiento binacional.
Ana Baron. WASHINGTON. CORRESPONSAL.

No pueden provenir de horizontes políticos y sociales mas diferentes. Sin embargo en la reunión que sostuvieron ayer en la Casa Blanca, el presidente George W. Bush y el brasileño Luiz Inacio Lula da Silva colocaron una vez más el acento en los puntos que los unen y dejaron de lado las divergencias. La cumbre de ayer tuvo además un adicional destacado: Brasil se convirtió para EE.UU. en un interlocutor de primer nivel para discutir temas de la agenda mundial, no sólo la relación bilateral. En las conversaciones entre los mandatarios se habló tanto de la pandemia de sida en Africa como del proceso de paz en Oriente Medio.

"Sin duda podemos sorprender al mundo con la relación", entre EE.UU. y Brasil, afirmó a los periodistas Lula, un ex sindicalista metalúrgico, hijo de una familia de indigentes que durante mucho tiempo tuvo un discurso antiamericano.

"Brasil es una parte increíblemente importante de pacífica y próspera Norte y Sudamérica. Puedo decir que desde la perspectiva de EE.UU. esta relación es vital, importante y creciente", afirmó por su parte el presidente Bush, un aristocrático hijo de otro ex jefe de Estado y hermano de un senador cuyas posiciones de derecha son bien conocidas.

A juzgar por el comunicado conjunto que firmaron al final de la reunión de 10 horas que tuvieron en la Casa Blanca, cara a cara, y con sus ministros, el acercamiento entre ambos mandatarios es mucho más que circunstancial.

Bush, impresionado

Lula y Bush crearon siete grupos de consultas de alto nivel, lo que institucionaliza la cooperación entre ambos países en el marco no sólo bilateral y regional sino también multilateral

El mandatario norteamericano sostuvo que "desde un punto de vista personal, estoy impresionado por la visión del presidente de Brasil. Es un hombre que tiene profundas preocupaciones por todo el pueblo brasileño".

Lula, a su vez, buscó remarcar que su intención de profundizar el vínculo es sincera. "Esta relación entre Brasil y los EE.UU. se ha forjado sobre la base de la sinceridad entre los pueblos y no apenas sobre el montaje de un espectáculo para la prensa y el mundo. Creo que Brasil es y puede continuar siendo un gran socio de los EE.UU.".

El comunicado conjunto subrayó que los dos países deben desarrollar una relación más estrecha y más fuerte.

"Es hora de definir un nuevo y decidido rumbo en nuestras relaciones, con una visión común de libertad, democracia, paz, prosperidad y bienestar para nuestros pueblos, con miras a la promoción de la cooperación hemisférica y global".

Los dos naciones han tenido enormes diferencias. No sólo por la oposición brasileña al ataque a Irak, sino además por las críticas que Brasilia elevó contra el proyecto de Washington para crear el ALCA, una zona de libre comercio desde Alaska hasta Tierra del Fuego. Esa iniciativa crea recelos en el sur del continente debido a que no hay claridad respecto a que EE.UU. operará una apertura equivalente a la que exige a sus socios más pobres.

Lula llegó a Washington con 10 de sus ministros que sostuvieron encuentros con sus colegas norteamericanos. Esa fue una de las notas destacadas de esta cumbre que se coronó con la firma de los siete acuerdos, incluyendo la creación de un mecanismo para consultas de alto nivel.

El otro dato importante es que Bush concedió a Lula la extensión de la agenda que en general se limita en este tipo de reuniones a cuestiones bilaterales, para discutir temas de mayor alcance global.

"El punto alto de esta reunión fue que discutimos la necesidad de garantizar la paz en el mundo y que para eso tenemos que garantizar el desarrollo", remarcó Lula da Silva antes de reunirse con el director del FMI, Horst Köhler.

Estados Unidos se comprometió en ese respecto a trabajar por el éxito del proyecto Hambre Cero, una iniciativa del gobierno brasileño para facilitar la alimentación de unos 40 millones de habitantes, 10 millones de los cuales sufren de hambre. Así como proveerles de atención de salud, educación y oportunidades para volver al mercado de consumo. Brasil ha dicho que necesita por lo menos de US$ 5.000 millones de dólares como punto de partida en los próximos dos años para ese plan.

Lula se colocó además como vocero de las naciones de la periferia mundial. "Los países en desarrollo quieren relaciones en serio", afirmó en una conferencia de prensa en la embajada de su país en Washington.

"Brasil debe estrechar sus vínculos con la India, con Argentina, con Africa del Sur", las naciones que pueden entrar en la categoría de potencias intermedias. Y concluyó que "el momento político del mundo es cada vez más complicado. Las economías están cada vez más cerradas, los países cuidan cada vez más celosamente sus propios intereses... Los más fuertes son los que tienen que ser más generosos".

Posted by HugoB at 28 de Junio 2003 a las 08:36 AM
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